Del amor fisurado, de la no otra y la burbuja dicotómica,
Del pensamiento moderno, de la mentira de la ciencia,
De las fuerzas armadas, o de las guerrillas traficantes,
De las fresias y fresas, de cerezas
De burócratas, traicioneros, zaristas, stalinos,
De lo inconmensurable de un espacio ínfimamente contabilizado, de eso que proyecta tu mirada en los espejos de mi mundo,
Del tesoro de la católica, o de las luchas de poder en el entendimiento,
De lo no dicho en las palabras que no dicen del dolor.
De lucro, racionalidad, especialización y de la colonización del mundo de la vida
De lo azulado, y volátil
De la pobreza calculada, del hambre de los sures,
De lo que no pudo, ni será jamás
De la producción flexible, del flujo del capital,
Del tiempo-lugar, de espacios de existencia
/Podría solventar el precio de mi carne en números negativos, /Podría solucionarme y volver a ser enigma irresoluble,
Regresar al laberinto sólo por placer…
Dibujar el rostro violáceo de la pensante
Que a nadie llega
Que a nadie encanta
A quien nadie lee,
La hipócrita del conocimiento burgués
La del capital cultural, la de lo simbólico,
Esa misma que no puede decir
Y que no dice por no ser
Y que calla diciendo, y que grita callando
Por expresar lo negado.
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