jueves, 15 de octubre de 2009



El beso de la noche
No se jacta de la esperanza propia de la persona que lo imagina,
Simplemente lo menta,
Lo vuelve espectro
,
Nube sobre cabezas
Cabezas sobre cuerpos,
Sin nada que decir, sin nada que pensar.



Saciedad de ansiedades,
De calambres de pensamientos estupefacientes que se vuelven materia,
Se cuelan por las rendijas,
Arrastrando mares y siluetas de la existencia.



Volviendo a mi cuerpo,
Espero no esperar,
No volver a hacerlo,
Ni por hoy, ni por mí.



Siento mirar el cielo,
Siento llorar las hojas viejas del otoño,
Siento brillos de sonrisas,
Llenas, aturdidas,
Estacionales, tal como el mismo otoño, de las lágrimas encontradas.



Extractos de lo intrínseco,
Pedazos de animatrones,
Espacios de esquizofrenia.



Vueltas de lo indómito.

jueves, 1 de octubre de 2009

May.

Y te subiste a mi fiesta...


Supiste comprender el pasado como cosas que pasan

Más allá del destino, mas allá del bien y el mal.

Hoy te devuelvo lo que no pude ver,

Lo del humo de mi cigarrillo,

Lo de la alegría perdida,

Lo que permití que pasara para que hoy sea una realidad.



Volvimos a ser un número par,

Para dejar de ser una ecuación sin resolución.


Las palabras en francés me ayudan y ni hablar de tu carisma

Y de tus amistades sencillas y alocadas

De tu música, de las noches, del sexo

del Deseo de seguir más allá de lo planeado.


Si tendría que decir que fue lo mejor de ti

Diría que eso es que hoy seas así

Tan brillante, alocada y estupidizante


Eso si que lo sabes hacer.

Eso si que es lo que disfruto con vos.


Ellas tuvieron el poder de hacer un mar de las cenizas.

Ellas tuvieron el poder de enfrentarse y hoy resultar estables.

Compañeras.

Históricas compañeras, una vez más.